Soy un hombre de 28 años. Leí en esta columna acerca de un hombre que, al hacer un trío, le falló la erección. A mí me pasó más o menos igual. La verdad me costó mucho convencer a mi esposa, pero al final aceptó. El problema fue que a mí no me gustó para nada. No sé qué me ocurrió, pero no me pude concentrar y no pude disfrutarlo. Me sentí mal. Sin embargo, a mi esposa sí le gustó y ahora ella quiere que hagamos un trío pero con un hombre. Yo no sé qué decirle. Si no me gustó con una mujer, menos con un hombre, pero siento que no puedo decirle que no.

Soy un hombre de 42 años. Tengo 18 años de casado. Mi esposa es una santa y nos llevamos muy bien. Siempre he tenido cuidado de no involucrarme con nadie. Para mí, cualquier aventura siempre fue una cosa breve. Sin embargo, hace tres años me enredé con una mujer de 21 años y no pude terminar la relación. Como no me fui a vivir con ella, subió algunas fotos íntimas al FB para que las vea mi esposa.

Soy un hombre de 34 años. Tengo seis años de casado. Mi esposa siempre ha sido quitada para el sexo, pero con la motivación adecuada nunca se negaba. Desde hace dos años casi nunca quiere tener relaciones sexuales. Nos hemos distanciado mucho y casi no estamos juntos. Mi sorpresa fue que un día de estos llegué a la casa y la encontré estimulándose con un vibrador. Yo me hice el que no vi nada, pero me siento muy mal.

Soy un hombre soltero de 23 años. Tengo dos meses de tener relaciones con una compañera. No somos novios formalmente, pero ahí vamos. Con otras novias y otras relaciones nunca he tenido problemas, pero, con ella, cuando tenemos relaciones sexuales me cuesta penetrarla, y cuando estamos teniendo la relación cada rato se me sale el pene. A ella no le duele, pero no deja de ser incómodo que esto pase.

Soy un hombre soltero de 22 años. Todos los compañeros de trabajo acostumbramos a ir a un bar que queda en mi pueblo, donde uno contrata muchachas. Yo siempre he sido muy cuidadoso y uso preservativo. Hace una semana estuve con una muchacha muy linda. A los días el pene se me puso rojo y me empezó un ardor y una picazón. El médico me dijo que me pegaron herpes. No sé cómo si yo usé condón y me cercioré de que no se hubiera roto.

Soy una mujer soltera de 21 años. Estoy estudiando en la universidad y tengo un novio desde hace ocho meses. Llevo un par de cursos con él en la facultad. Él es mayor siete años y tiene su apartamento. Yo casi no había tenido relaciones hasta que lo conocí. Siempre he padecido de agrura y acidez. El problema es que cuando tengo relaciones sexuales me da mucho, tanto que me dificulta el disfrute de las relaciones.

Soy un hombre soltero de 24 años. Tengo dos años de “jalar” con mi novia. Ella es de mi misma edad. La conozco desde que estamos pequeños porque crecimos juntos. Nos hemos llevado muy bien, pero hace como seis meses me di cuenta de que tuvo relaciones con un compañero del trabajo. Ella me pidió perdón y yo la perdoné. Sin embargo, cuando tenemos relaciones me la imagino con él y no puedo seguir. Me da por reclamarle loque hizo.

Soy una mujer de 32 años. Me casé hace cinco años. La vida sexual era “un éxito”, porque teníamos mucha química. Él es ocho años mayor. Como la relación iba muy bien, nos fuimos a vivir juntos, pero en ese momento él cambió totalmente. Se apartó en lo sexual. Ahora tenemos tres años de casados y no tenemos relaciones porque él no consigue la erección. Esta situación me parece insoportable y creo que estoy al borde de la separación.

Soy una mujer de 27 años. Me casé hace dos años con un hombre con el que tuve un noviazgo de tres años. Sexualmente siempre podía durar lo que quisiera, hasta una hora y, si yo quiero, aún más. Ahora que me doy cuenta de que en realidad es que él no termina, es decir, él no expulsa el semen por más que lo estimule. Él dice que siempre ha sido así, pero ahora queremos tener un bebé y así no se puede.

Soy una mujer soltera de 24 años. Siempre fui muy fogosa sexualmente. Inicié mi vida sexual muy chiquilla y he tenido relaciones con muchos hombres, pero nunca había tenido relaciones anales. Tengo una nueva pareja desde hace nueve meses. Lo hemos hecho varias veces y me gusta mucho, pero siempre sangro y quedo con sangrado dos o tres días. Casi no me duele. A mí me parece normal, pero a él le preocupa mucho.

Soy una mujer soltera de 20 años. Apenas estoy iniciando mi vida sexual. Solo he tenido relaciones con mi novio. Él me pide que le haga sexo oral, pero no puedo. No me gusta y me da asco. No es que él huela mal o tenga una infección. Es que, sin querer, hago arcadas. Él se molesta y dice que lo estoy rechazando. Hace unos días trajo unos condones con sabores, pero tampoco nos sirvieron. Más bien me fue peor.

Soy una mujer de 35 años. Tengo once años de casada. Nuestra relación siempre ha estado bien, aunque sexualmente siempre he sido muy apagada. Hace un año comencé a recibir mensajes de que mi esposo andaba con una compañera de trabajo, y hasta me mandaron fotos. Desde entonces, tengo como una manía de tener relaciones con él a cada rato. No es por deleite. Es como una necesidad, y las disfruto como nunca.

Soy un joven soltero de 22 años. Tengo una relación de dos años con una compañera de la universidad. Hace seis meses terminamos y volvimos hace un mes, y ese día tuvimos relaciones. No usamos el condón porque ella se pone la inyección todos los meses. Luego me dijo que desde que nos separamos dejó de inyectarse y tampoco toma pastillas. Ahora la regla no le ha bajado. Tiene siete días de atraso, pero no quiere hacerse la prueba.

Soy un hombre de 55 años. Tengo más de treinta años de casado y hasta soy abuelo. Ahora con estas campañas del examen de próstata, en mi casa tienen “la jodedera” de insistirme en que consulte para que me haga el tacto rectal. Yo no entiendo cómo con tantos avances de la ciencia todavía hoy se sigue haciendo ese examen. A mí me parece que ese examen es una barbaridad y lo siento como una falta de respeto.

Soy un hombre soltero de 19 años. Todos los amiguillos del barrio vamos a conciertos y bares a buscar muchachas. Hace unos quince días me topé con una conocida muy guapa, mucho mayor que yo y tuvimos relaciones. Como es del pueblo, a los dos días me buscó y me dijo que estaba embarazada y que era mío. Me queda la duda de si soy tan “salado” que, usando condón y con una sola relación, quedara embarazada.

Soy una mujer de 29 años. Tengo dos años de casada. Mi esposo me parecía el hombre más guapo de la Tierra. Pero en el último año ha aumentado cerca de quince kilos. Ahora tiene una panza enorme y, aunque no le he dicho nada, sexualmente perdió el atractivo. Me siento mal porque uno no debe fijarse solo en eso, y para mí el cariño no ha cambiado, pero sexualmente siento que las cosas ya no son iguales.

Soy una mujer divorciada de 36 años. Tuve dos partos muy difíciles y quedé con cierta incontinencia urinaria. Me orino casi con cualquier esfuerzo. Cuando toso, me río o levanto cosas se me sale la orina. Me divorcié después de tener a mi segundo hijo y pasé dos años sin tener vida sexual. Ahora me di una nueva oportunidad y hace seis meses inicié una nueva relación. Sexualmente somos muy activos. Tenemos relaciones diarias o más. Y no sé por qué, pero ahora ya casi no me orino.

Soy una mujer de 23 años. Tengo dos años de tener un noviazgo. No vivimos juntos. Yo nunca estuve muy involucrada en la relación, pero él es muy servicial y me está ayudando a terminar mi carrera. Por mi parte, soy una mujer delgada, con una buena figura. Creo, “modestia aparte”, que soy mucho para él. Hace unos días rompió conmigo y está empezando con una muchacha “que nada que ver conmigo”. Es poco agraciada. No entiendo cómo un hombre puede hacer eso.

Soy una mujer soltera de 23 años. Hace tres meses terminé con mi novio. Con él tenía una vida sexual muy activa. Casi teníamos relaciones a diario. Hace unos días fui al cine a ver esa película de terror del payaso. A mí no me gustan esas películas y me dio mucho miedo. De un momento a otro me di cuenta de que estaba excitada y hasta sentí varios orgasmos. Yo había leído en esta columna de gente que le había pasado cosas similares. No entiendo por qué.