Quiero una cita

Conozca la relación.

PRESIÓN ALTA E IMPOTENCIA.

Tabla de Contenidos

PRESIÓN ALTA E IMPOTENCIA.

La sexualidad siempre representó un enigma para la ciencia, sobre todo porque las autoridades conservadoras imperantes en el último milenio le dieron a la intimidad un aura espiritual lejana y casi ajena al cuerpo de tal manera que censuraron cualquier abordaje médico de los problemas sexuales.

Escribir al DR. Mauro Hoy

Los avances de la ciencia descubrieron que por el contrario la respuesta sexual es un mecanismo complejo que requiere de la integridad del funcionamiento del organismo. Es decir, además del sentimiento, del amor, de la ternura, para funcionar bien en la cama se requiere del buen funcionamiento de los diversos órganos del cuerpo.Por esta razón, diversas enfermedades que no afectan directamente a los órganos genitales pero si a otros órganos que en principio no tienen que ver con el sexo, pueden producir serias alteraciones sexuales.

Tal es el caso de la hipertensión arterial, que es un padecimiento en el cual por razones desconocidas se eleva la presión arterial provocando que el corazón tenga que esforzarse más para hacer circular la sangre por el organismo.La hipertensión arterial, llamada popularmente “presión alta” tiene la particularidad de que pasa largos periodos de tiempo sin dar síntomas. Aun cuando puede provocar dolor de cabeza, problemas visuales, confusión, sangrado nasal, náuseas o vómitos, estos síntomas rara vez suceden o solo suceden después de que el paciente ha pasado largos periodos de tiempo con la presión alta y sin recibir tratamiento.

Cuando la presión alta no ha sido tratada o cuando el tratamiento no es totalmente efectivo es muy frecuente que se presenten problemas en el área sexual. Entre las manifestaciones sexuales más frecuentes figuran: dificultad para conseguir o mantener la erección, disminución en la firmeza de las erecciones, la necesidad de una mayor estimulación para conseguir erecciones firmes o la dificultad para mantener relaciones periódicas.

La gran ventaja que tenemos, es que la “presión alta” es una enfermedad muy fácil de diagnosticar. Con solo tomarse la presión dos o tres veces en una semana nos podemos dar cuenta si se presenta cifras que ameritan de una consulta médica.En nuestro país además, desde farmacias hasta supermercados brindan el servicio de toma de presión, de manera que el chequeo está al alcance de toda la población.

Venta de libros del Dr. Mauro