Puntos claves.
LA LACTANCIA COMO MÉTODO ANTICONCEPTIVO.
Una buena costumbre.
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La naturaleza ha previsto cierto período de recuperación entre un nacimiento y otro, y ha creado una serie de mecanismos hormonales para que, durante el amamantamiento, sea menos probable un nuevo embarazo.
El término lactancia o amamantamiento da la falsa idea de que con solo dar de mamar la mujer está protegida del riesgo de embarazo, y eso no es cierto. Para que la lactancia funcione como método anticonceptivo, deben cumplirse tres requisitos:
• No tienen que haberse reiniciado los períodos menstruales.
• El bebé debe tener menos de seis meses de edad.
• El 85% de la alimentación del niño debe estar basado en leche materna. Esto implica que durante el día se debe dar de mamar regularmente cada cuatro horas, y durante la noche al menos cada cinco horas.
El mecanismo anticonceptivo principal es impedir la ovulación; si no hay óvulo, el espermatozoide no puede fecundar. Se encuentran fallos apenas de dos embarazos en cien mujeres que lo usan durante un año. En aquellas mujeres que no cumplen de manera estricta, la frecuencia de fallos es alta, hasta de veinticinco embarazos en cien mujeres que lo utilicen.El efecto anticonceptivo es inmediato si el método se instaura desde el mismo momento del nacimiento.
En las mujeres portadoras del virus del VIH/SIDA, se sugiere utilizar otros métodos debido al riesgo, aunque mínimo, de contagiar al niño a través de la leche. Tampoco se recomienda en pacientes que están recibiendo tratamientos cuyas sustancias pueden dañar al niño.
La gran ventaja de este método es que brinda protección eficaz, al menos durante seis meses, y en algunas ocasiones por más tiempo, si la mujer sigue amamantado frecuentemente de día y de noche. Este fomento de la lactancia materna, contribuye a la salud del niño y de la madre.
Desde luego que como todo método conlleva algunas desventajas, entre ellas que no hay certeza de su eficacia después de los seis meses. No protege contra las enfermedades de transmisión sexual. Muchas mujeres no pueden cumplir las lactancias frecuentes, por razones laborales o de agotamiento; por lo tanto, se sienten desprotegidas.
Desde el punto de vista sexual la lactancia puede disminuir el deseo y provocar dolor durante las relaciones sexuales. También es importante tener en cuenta que algunas mujeres piensan que con solo dar de mamar se produce el efecto anticonceptivo, y rápidamente se embarazan. Esto ha originado cierta desconfianza en la población. Si el temor no se puede superar o interfiere en las relaciones sexuales, es mejor utilizar otro anticonceptivo.
Muchos hombres que disfrutan sexualmente del seno lactante ven este método con buenos ojos. Como hemos indicado, durante la lactancia algunas mujeres experimentan un descenso en el deseo sexual y dolor al momento de la penetración. Estos efectos desaparecen al suspender la lactancia.