SE ME CAYÓ LA VEJIGA, ¿PUEDO TENER SEXO?
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Soy una mujer casada de 45 años. Desde hace mucho tiempo el doctor me dijo que como tuve un parto muy difícil la vejiga estaba cayéndose. Me mandó unos ejercicios y me recomendó no aguantarme las ganas de orinar. Por mi trabajo, casi no lo hacía y ahora me dijo que se me había bajado más pero todavía no es de operar. Me dio vergüenza preguntarle si puedo tener relaciones y es que yo disfruto mucho con mi marido y quiero aprovechar este fin de año en CUARENTENA.
La vejiga caída o cistocele es una alteración muy frecuente que probablemente afecta al 75% de la población femenina. Aunque son muchas los factores causales, se identifican dos que juegan un papel protagónico, los partos difíciles y prolongados, así como los hábitos retencionistas. Recordemos que el niño al momento de nacer estira los músculos vaginales y en algunos casos se producen desgarros en estos músculos que son los encargados de dar sostén al recto, la vejiga y al caño de la orina.
El otro factor, son los hábitos retencionistas, la mujer que se aguanta las ganas de orinar y no orina por largos periodos, va estirando la vejiga, la cual con el tiempo se hace más grande y por ende más pesada al punto que se cae “por su propio peso”.
Las cistoceles producen diversas molestias, sobre todo la sensación de que una masa o “pelota” se sale por la cavidad vaginal y en algunos casos se acompaña de la salida involuntaria de la orina.
Cuando se consulta a tiempo, las cistoceles responden a diversos tratamientos que son elementales, como orinar frecuentemente, una adecuada hidratación, así como la realización de unos ejercicios especiales llamados ejercicios de Kegel. En etapas más avanzadas los ginecólogos preferimos optar por la cirugía. Afortunadamente, la vida sexual se puede continuar aun cuando la vejiga esté baja o caída.