Soy una mujer de 49 años. Tengo 29 años de casada y hemos sido muy felices y con una vida sexual plena. Yo siempre he disfrutado con ver la salida del semen de mi esposo; eso como que me enciende. El problema es que desde hace unos meses mi esposo no puede eyacular. No le sale semen y he visto como que luego lo bota con la orina. Él es un hombre muy sano, tiene buenas erecciones y no padece de nada.

Algunas enfermedades importantes que afectan el funcionamiento del organismo pueden dar sus primeras manifestaciones en el área sexual. En estos casos, la persona se siente sana, sin molestias ni síntomas, y solamente nota cierto deterioro puntual en el rendimiento sexual. Esa es una de las razones por las cuales es importante consultar cuando se observan cambios en la vivencia íntima. 

La diabetes es una enfermedad muy frecuente en nuestro medio y, cuando no se detecta y no es tratada, es común que dañe la sexualidad, y en particular puede afectar la salida del semen. En estos casos, el varón mantiene el deseo sexual, presenta buenas erecciones y experimenta el orgasmo, pero el semen no sale al exterior, sino que se desvía hacia la vejiga y sale posteriormente con la orina.

Esto es producto de que en la diabetes se daña una especie de válvula o empaque que normalmente impide ese desvío del semen hacia la vejiga. Desde luego, la diabetes no tratada puede dañar diversos órganos, como el corazón, los riñones, la vista. Por eso, se debe consultar apenas se advierten las primeras molestias.