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¿Cómo se dan realidad y certidumbre dentro de la subjetividad en la salud mental?

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¿Cómo se dan realidad y certidumbre dentro de la subjetividad en la salud mental?

Dr. Winston Villamar, Ph. D.    

Médico Psiquiatra  

Escribir al DR. Mauro Hoy

La diferenciación entre subjetivo y objetivo es un artificio de la mente para no confundirse en cuanto a su percepción de la realidad. Esto, en primer lugar porque no existe nada subjetivo que se pueda realizar como subjetividad pura, independientemente de lo objetivo; complementariamente, nada existe como objetividad sino entra en el procesamiento de la subjetividad. Pero la diferenciación nos ayuda a reconocer los espacios para no sentirnos como dentro de una película de ficción en una sola dimensión. La creación de estos espacios nos permite, por ejemplo, hablar de tú y yo, o del yo mío del que yo mismo tengo conciencia. Entonces, hablamos de “mi” cuerpo, “mi” mente, etc.

La idea expresada en el párrafo anterior la he utilizado para entrar a un campo dentro de la salud mental que es crítico a la hora de juzgar nuestra calidad de vida interior (y exterior): así nos respondemos (y nos responden) en cuanto a si somos realmente sanos, o qué nivel de salud estamos gozando; o si nos sentimos enfermos o solamente desajustados.

En un sentido lato: por la subjetividad, la realidad es lo que nos parece (un ejemplo: las voces que oye una persona a quien los otros la llaman enferma porque ellos no las oyen).

En el mismo sentido, gracias a la subjetividad, la verdad es dada por el sentido de certidumbre (siguiendo con el ejemplo, la persona que oye las voces que los otros no oyen, tiene la certeza sobre lo que escucha, aunque los demás lo nieguen, pero él cree a su voces).

Ante esta situación, buscamos consenso de grupo, y cuando este nos parece sustentable, lo elevamos a la categoría de ley no escrita. Veamos algunas tendencias históricas:

1. En un tiempo, lo más sano era desarrollar los sentimientos al más alto nivel consensuado. Ahora, parecería que es la inteligencia, sobre todo la productiva (antes que la creativa).

2. En cierta época ya pasada, la relación entre personas del mismo grupo etario era más integrada, ahora parecería la de mayor confrontación por dominio de espacio y poder.

3. Antes, el ocio era considerado como una virtud siempre y cuando no fuera excesivo, pero en este tiempo es consignado dentro de una vindicta social.

4. En algún tiempo ya ido, crear vínculos se consideraba como algo esencial para incentivar la salud mental, ahora parecería que se exalta la soledad (a veces acompañada de mil aparatos para entretenerse o seudocomunicarse dentro del aislamiento).

¿Significaría esto que los tiempos pasados fueron mejores, o que lo nuevo es lo que realmente vale? Es aquí donde entra el discernimiento del individuo para relacionarse con la subjetividad social y decidir a qué creer en lo que corresponde a la relatividad de su realidad pro salud. Lo ejemplifico con el caso de los programas de modas que se dan con la presentación a veces de ropa tan estrafalaria, cara y que al verlos nos recuerdan la historia del rey desnudo (el que fue engañado en su vanidad por unos supuestos creadores del traje invisible, el que el monarca compra y con el que luego se exhibe ante el pueblo; todos gritaban “¡Qué hermoso ropaje!, ¡qué suntuosa vestimenta!”, hasta que un niño grita: “¡Está desnudo!” ). De repente, podría ser bueno para nuestro esclarecimiento pro salud mental, no actuar con la inmadurez de un niño, pero sí con su lucidez.

Atentamente,

Dr. Winston Villamar.

Un pensamiento:

 “Lo que integra mi yo interior y mi yo exterior es mi conciencia de realidad”

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En relación al boletín anterior (¿Cuál es la tecla mala en el piano de la salud mental?), no hemos recibido preguntas.

REVISION DE OBRAS

El libro recomendado para este mes es “La broma infinita”, del autor norteamericano David Foster Wallace.

UN NUEVO LIBRO DEL DR. WINSTON VILLAMAR

Se trata de “El mendigo”, en la categoría de literatura reflexiva. Si desea adquirirlo puede solicitarlo a la secretaría de Mentalsanitas, en esta misma dirección.

 

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