La autora Jeannette Lofas, en su libro “Step Parenting”, revela los resultados de recientes estudios llevados a cabo en Estados Unidos, mostrando el fuerte impacto que el divorcio está produciendo en la sociedad actual. 

Esta fuerte transformación de la familia parece señalar que en un futuro cercano la estructura social se habrá modificado significativamente. Veamos los resultados de estos estudios:

1. La familia tradicional se está transformando. Cada vez es más  frecuente encontrar el fenómeno de familias reconstituidas. Todos los días se celebran mil trescientas nuevas uniones.

2. El cincuenta por ciento (50%) de las familias en los Estados Unidos son producto de segundos matrimonio.  

3. Un matrimonio, en promedio, dura siete (7) años, y uno de cada dos matrimonios termina en divorcio.

4. El setenta y cinco por ciento (75%) de las personas que se divorcian se vuelven a casar. Sin embargo, aproximadamente el sesenta y seis por ciento (66%) de esas parejas, que tienen hijos del primer matrimonio, se separan.

5. Un cincuenta por ciento (50%) de los sesenta millones de niños menores de 13 años viven con uno solo de sus padres biológicos y su nueva pareja.

6. El cincuenta por ciento (50%) de las mujeres tienen alguna relación con familias reconstituidas, ya sea como madres o como esposas de hombres con hijos.

7. En las parejas menores de treinta años, 2 de 3 terminan en divorcio.

8. Un estudio realizado por la Universidad de Boston reportó que el setenta y cinco por ciento (75%) de las mujeres profesionales que contrajeron matrimonio con un hombre divorciado con hijos afirma que si tuviera que tomar de nuevo la decisión, NO se casarían con un hombre que tuviera hijos.

Existen otros números que dibujan el escenario del divorcio:

- El cuarenta y un por ciento (41%) de los hijos de padres separados son temerosos, agresivos, tienen baja autoestima y presentan dificultades en su comportamiento o desempeño escolar.

- Solo un cuarenta y cinco por ciento (45%) de los niños superan satisfactoriamente el divorcio de sus padres.

- El cincuenta por ciento (50%) de las mujeres y el treinta por ciento (30%) de los hombres continúa siendo agresivo con su expareja después del divorcio.

- Durante el primer período del divorcio, los padres tienen menos tiempo disponible para compartir con sus hijos y debido a su situación emocional, disminuye su capacidad de apoyarlos y disciplinarlos.

- Muchos padres separados comparten con sus hijos más detalles de su vida privada de los que los niños están en capacidad de comprender y manejar.

- Algunos padres divorciados al inicio llevan una vida desordenada que les dificulta continuar ejerciendo su rol de papás como lo hacían antes de la separación.

- Los hijos de padres que después del divorcio siguieron compartiendo su rol como tales, a pesar de haber terminado su relación matrimonial, continuaron su buen desarrollo emocional y adecuado desempeño escolar y social. Esto, debido principalmente a que la relación entre los adultos les permitió mantener y fortalecer los lazos afectivos con ambos.

- Dos años después del divorcio de sus padres muchos niños se han adaptado satisfactoriamente a su nueva vida, y su desempeño escolar y social es bueno.

- El veinticinco por ciento (25%) de los jóvenes provenientes de familias divorciadas presentan serios problemas en su desempeño social o emocional; un diez por ciento (10%) de los que provienen de familias intactas también.

- La mayoría de los adultos jóvenes provenientes de familias de padres divorciados son exitosos profesionalmente, tienen relaciones de pareja estables y poseen un gran sentido de vida.

- El setenta por ciento (70%) de los adultos que vivieron el divorcio de sus padres cuando eran niños considera que la separación es una solución aceptable para terminar un mal matrimonio, aun cuando haya hijos. El cuarenta por ciento (40%) de los que crecieron en familias nucleares piensa de la misma manera.