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PREGUNTAS COTIDIANAS

NO QUIERO QUE ME HAGAN EL TACTO RECTAL

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NO QUIERO QUE ME HAGAN EL TACTO RECTAL

Soy un hombre de 55 años. Tengo más de treinta años de casado y hasta soy abuelo. Ahora con estas campañas del examen de próstata, en mi casa tienen “la jodedera” de insistirme en que consulte para que me haga el tacto rectal. Yo no entiendo cómo con tantos avances de la ciencia todavía hoy se sigue haciendo ese examen. A mí me parece que ese examen es una barbaridad y lo siento como una falta de respeto.

Escribir al DR. Mauro Hoy

Una de las formas más efectivas para estudiar y evaluar los diferentes órganos consiste en tocarlos para determinar la presencia de diversas irregularidades. Así se realiza en cualquier parte accesible del cuerpo, como la mama, los testículos, las articulaciones; en fin, es una parte accesible esencial en la evaluación médica. La próstata no es la excepción: tocarla nos brinda una cantidad enorme de información.

El problema es que esta glándula tiene la particularidad de que no es tan fácilmente alcanzable como otros órganos, por encontrarse ubicada en las entrañas de la cadera del varón. Entonces, la única forma de tocarla es a través del examen digital de la región anal. En realidad, el examen es sencillo, rápido, indoloro, económico y sumamente útil. Por eso sigue siendo el protagonista de la evaluación prostática.

Desde luego, todavía algunos hombres sienten amenazada aquella hombría de la que antes se hablaba, la cual prohibía cualquier contacto con la región anal más allá de la higiene cotidiana. Recordemos que el cáncer de próstata se ha convertido en el tumor masculino más arrasador y mortal. Diariamente en Costa Rica se diagnostican cerca de tres cánceres diarios, y cada día se nos muere un paciente como producto de un diagnóstico tardío. Claro, hoy contamos con métodos sofisticados, como el examen de sangre, el ultrasonido y la biopsia, pero todos se complementan entre sí y no sustituyen el tacto rectal.

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