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PREGUNTAS COTIDIANAS

NO ME HACEN FALTA LOS HOMBRES.

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NO ME HACEN FALTA LOS HOMBRES.

Soy una mujer soltera de 32 años. Para mí, el sexo siempre ha sido muy importante. He tenido muchas parejas, pero siempre me ha ido muy mal en el amor. Hace un tiempo decidí comprarme un dildo. Al inicio me sentí extraña pero ahora lo disfruto mucho y la paso muy bien, al punto que ya no necesito tener relaciones. Los hombres ya no me hacen falta. Cuando tengo deseos sexuales me satisfago sola. No sé si eso está bien.

Escribir al DR. Mauro Hoy

Esta pregunta exige varias respuestas. Por un lado, los dildos o consoladores también llamados en nuestro medio vibradores, son dispositivos muy efectivos para generar placer y desencadenar el orgasmo. Su utilización usual no conlleva ningún riesgo.

De igual manera, la abstinencia sexual es decir la ausencia de relaciones sexuales, tampoco tiene repercusiones negativas para el organismo. Desde esa perspectiva los dildos resultan sumamente nobles.

Por otra parte, debemos recordar que los vínculos no se forman solo por motivos sexuales. Es decir, el convivio armónico, cariñoso y satinado de amor son las verdaderas razones por las que vivimos en pareja. El sexo es el hilo más delgado por el que se puede sostener una relación.

Aun cuando el dildo supla el deleite sexual, nunca podrá sustituir los besos, los abrazos, la voz susurrada, el mutuo auxilio, el consejo sabio, el acuerpamiento cálido, la conversación amena, el saludo festivo, la palabra cariñosa que brinda un vínculo afectivo.

Esas son las verdaderas facetas que tenemos que buscar en una relación. La variable sexual es la menos importante. Sentirnos queridos, sentir que queremos, sentirnos emocionalmente plenos, es la verdadera brújula de un vínculo.

 

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